El mercado laboral está cambiando a pasos agigantados. Hace apenas unos años, la mayoría de las personas se desarrollaban profesionalmente en una única empresa. Allí iniciaban su carrera profesional, ascendían y se jubilaban.
En la actualidad este camino cuenta con más curvas e incertidumbre y la formación es la única forma de ganar cierta estabilidad laboral. Potenciar la empleabilidad es necesario como profesional y una de las formas de hacerlo con mayor eficacia es lo que conocemos como formación continuada.
Lo hemos dicho y repetido en varias ocasiones pero la tecnología avanza mucho más rápido que nuestros conocimientos, y es esencial estar al día y ser competitivo profesionalmente.
Sin embargo, ahora entramos en un terreno un poco más resbaladizo: crear nuestra propia estrategia de formación para dar los pasos necesarios y conseguir nuestro objetivo laboral.
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Toggle¿Qué tener en cuenta a la hora potenciar tu perfil profesional?
Existen dos condicionantes que debemos analizar antes de ponernos a trazar nuestra estrategia de formación.
Disponibilidad
Es imprescindible destinar en nuestra rutina diaria un tiempo de formación. Por tanto, debemos saber en qué horas del día podríamos realizar ese curso o asistir a la clase que necesitamos. Si compaginamos trabajo y estudios debemos ser realistas, ya que hacerlo de forma simultánea puede ser una sobrecarga. Es mejor empezar poco a poco e ir añadiendo dificultad conforme nos vayamos adaptando.
Estudios
Dependiendo de nuestros estudios podremos tener acceso a uno u otros cursos o grados. Si queremos realizar un máster especializado necesitaremos previamente estudios superiores mientras que un ciclo formativo será necesario solo la ESO. Incluso hay cursos de especialización que no tienen requisitos y nos pueden ayudar a completar una parte más práctica. Analizar esta situación, nos llevará a trazar una formación a corto, medio o largo plazo.
Una vez hayamos reflexionado sobre estas cuestiones debemos identificar aquellas áreas de desarrollo en las que queremos mejorar y que pueden convertirnos en el candidato/a idóneo para el trabajo que deseamos obtener.
¿Qué áreas de desarrollo son claves para la empleabilidad?
Identificar cuáles son tus puntos débiles o las áreas en las que mejorar para convertirte en ese candidato ideal para las ofertas de empleo no es una tarea fácil.
Por este motivo, en Talento Digital hemos elaborado un diagnóstico de formación a través de un pequeño cuestionario en el que según tus respuestas te ofrecemos unos cursos u otros con los que crecer profesionalmente.
Recuerda que todos nuestros cursos son totalmente gratuitos.
Hay que tener en cuenta que cada candidato es diferente y que podemos destacar en unas cosas u otras.
Por tanto, no es fácil identificar por ti mismo qué es aquello que más te conviene según tus necesidades profesionales. Para facilitar esta tarea, te damos a conocer las tres áreas de desarrollo y sus habilidades que, en estos momentos, los reclutadores están teniendo más en cuenta para la selección de candidatos.
Conocimientos:
- Conocimientos específicos: La formación especializada es una de las cuestiones más valoradas por las empresas. Cada vez más, las ofertas de empleo tienen como requisito conocimientos específicos de una determinada área que solo se pueden adquirir posteriormente con cursos o másteres especializados.
- Idiomas: Si no aparece como requisito indispensable, sí se valora de forma muy positiva en todas las ofertas de empleo y puede inclinar la balanza hacia tu candidatura.
- Competencias digitales: El manejo de aplicaciones informáticas se ha convertido en un requisito fundamental.
Habilidades organizativas:
- Toma de decisiones: En ocasiones, existen situaciones empresariales que requieren tomar una decisión de forma rápida y coherente.
- Análisis: Esta habilidad vendría ligada con la anterior, ya que para tomar una decisión se requiere un análisis previo con el que identificar las ideas, comprenderlas y aplicarlas de forma adecuada.
- Frustración: La inteligencia emocional es una las cuestiones que cada día más se valora en el ámbito laboral. Conceptos como tolerancia a la frustración se buscan entre los reclutadores y lo mejor son cuestiones que también se pueden ir trabajando con cursos específicos.
Habilidades de equipo:
- Habilidades comunicativas: Estamos hablando de ser un gran orador sino saber escuchar activamente, entender lo que están diciendo y, por supuesto, saber cómo y cuándo decir las cosas. Se trata de una de los requisitos clave, sobre todo en cargos directivos.
- Trabajar en equipo: La mayoría de las empresas están divididas en departamentos y estos a su vez por equipos que deben de trabajar de forma coordinada y conseguir objetivos grupales. No se trata de una habilidad fácil pero sí se puede perfeccionar con formación específica.
- Empatía: Al igual que la tolerancia a la frustración, las soft skills están ganando terreno en el mundo profesional y la empatía se encuentra entre una de las más valoradas. Poder ponerse en el lugar del compañero ayuda a mejorar las relaciones dentro del grupo y el trabajo en equipo sea un éxito.
Como puedes ver, existe un amplio abanico de posibilidades en el mundo de la formación subvencionada. Algo que está lejos de la antigua creencia que son cursos banales y sin utilidad. A día de hoy, miles de personas han logrado especializarse con los cursos gratuitos del SEPE y conseguir ese ascenso que necesitaban.
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